El Ayuntamiento aprueba un decreto para el desarrollo de la Semana Santa de Motril

El Ayuntamiento de Motril junto con la Junta de Gobierno de la Agrupación de Hermandades y Cofradías de Semana Santa y la Junta General de Hermanos Mayores de la misma comunicaron ayer de manera conjunta y unánime la decisión de realizar las diferentes estaciones de penitencia previstas en la Semana Santa de 2023. Una decisión que viene respaldada por un dispositivo especial que velará por el normal desarrollo de las distintas salidas procesionales que albergarán en la ciudad una gran confluencia de personas. Además, al dispositivo organizado se añade la planificación ordinaria de la Policía Local de Motril. 

Ante los últimos acontecimientos, y dado que la Semana Santa es un evento especialmente sensible y con un enorme atractivo turístico para la ciudad, el Ayuntamiento ha aprobado un decreto para asegurar la seguridad ciudadana durante esta celebración. Para ello, de modo anticipado y programado, se cerrarán las vías urbanas que se verán afectadas por los recorridos de las procesiones, con el objetivo prioritario de mantener la seguridad de los participantes y asistentes, manteniendo también la mayor normalidad posible para los vecinos y la vida ciudadana y sus servicios. También se ha previsto un refuerzo con vallado en todo el perímetro por el que transitarán los diferentes cortejos procesionales.

Además, el dispositivo prestará una especial atención a la ciudadanía, con informadores y voluntarios con el objeto de asegurar que las cofradías y los ciudadanos discurran por estos tramos con seguridad. El Consistorio insiste en que, de acuerdo con lo tratado en la Junta Local de Seguridad celebrada el pasado 20 de marzo de 2023, se van a ejecutar los protocolos y dispositivos de seguridad. A pesar de que la Policía Local no prestará un servicio de horas extraordinario, el Ayuntamiento espera contar con el servicio ordinario de agentes policiales.

Así mismo, el Ayuntamiento de Motril ha apelado a la responsabilidad ciudadana para que la celebración de un evento de esta envergadura, que dará comienzo mañana Sábado de Pasión y que se prolongará hasta el Domingo de Resurrección, se desarrolle con normalidad y sin incidentes.