El E.V.A.9 lleva sus 50 años de historia al Castillo-Fortaleza de Carchuna

La alcaldesa de Motril, Luisa María García Chamorro y la presidenta de la E.L.A Carchuna-Calahonda, Concepción Abarca, junto al comandante-jefe del E.V.A 9 de Motril, José Luis Rando, han inaugurado la exposición fotográfica conmemorativa de los 50 años de historia del escuadrón. Tras su paso por la Casa de la Condesa motrileña, la impactante exhibición de un abundante y nostálgico material histórico de “Aviación” llega ahora al castillo-fortaleza de Carchuna, un enclave enormemente simbólico; algo que la alcaldesa no ha pasado por alto al recordar sus orígenes históricos y su nacimiento en el siglo XVIII como un espacio estratégico que pretendía evitar las incursiones piratas, desde la playa de Carchuna, hacia la ciudad de Motril por su norte. “Y he ahí que, en la retaguardia de un territorio que, entonces, no era más que un inmenso espacio agreste y despoblado, el castillo de Carchuna amortiguó no pocas incursiones e intento de invasión de la propia ciudad de Motril, hechos que se hubiesen producido por su retaguardia y hubiesen provocado no pocas pérdidas de vidas humanas”, dijo García Chamorro estableciendo un simil con “esa defensa silenciosa que, ahora, caracteriza al Escuadrón de Vigilancia Aérea número 9 y que, desde hace 50 años, salvaguarda la seguridad del territorio nacional en una amplísima franja que comprende desde el Estrecho de Gibraltar al Mar de Alborán. Un escuadrón que nos contempla, protege y al mismo tiempo se eleva como un símbolo de unidad, de valores y de tradición. Sí, tradición, porque -amigos del EVA 9, ya sois parte del acervo social, cultural y humano de Motril”. 

Un guiño a la historia que resaltó el propio comandante jefe del EVA 9, José Luis Rando, que volvió a agradecer al Ayuntamiento de Motril “su implicación, compromiso y cariño hacia todo cuanto tiene que ver con su escuadrón”. Agradecimiento recibido por la teniente de alcalde y presidenta de la E.L.A de Carchuna-Calahonda, Concepción Abarca, quien recordó a tantos carchuheros y caleños “que han prestado allí su servicio militar, que vivieron y respiraron el ambiente de camaradería y sacrificio que se vivía bajo esas impresionantes estructuras militares, sobre el imponente monte del Conjuro”. Para Concepción Abarca, la exposición tiene un importante matiz emocional para decenas de personas, a lo que contribuye el fantástico montaje que se ha realizado en el interior del castillo.