El Hospital de Motril activa una unidad Covid destinada exclusivamente al traslado de posibles pacientes positivos

El distrito sanitario Sur de Granada cuenta, desde el inicio del mes de septiembre, con una unidad exclusiva para el traslado de pacientes Covid, tras el acuerdo alcanzado con el Consorcio de Transporte Sanitario (CTS) de Granada y Protección Civil de Motril. El centro hospitalario ha querido prevenir con más personal y recursos las posibles consecuencias futuras de la pandemia en este territorio. La colaboración se ha hecho especialmente necesaria para liberar la sobrecarga del personal del Servicio de Urgencias de Atención Primaria, que debía desinfectar sus vehículos en cada traslado de Covid y que, a la vez, también tenía que estar operativo para acudir a otras emergencias. Los procesos para el traslado de posibles pacientes de coronavirus son especialmente lentos debido a los protocolos que hay que seguir para entrar en contacto con los pacientes y la posterior desinfección que hay que realizar tanto en las personas como en las ambulancias.

La situación global de la pandemia no permite improvisaciones y el distrito que engloba los territorios de la Costa Tropical y la Alpujarra ha decidido que, tras el incremento del número de casos de coronavirus que venía siendo notable en estos meses de verano en todo el país y, más especialmente en los territorios de la costa granadina, se hacía especialmente necesaria la activación de esta unidad que colaborará estrechamente con el equipo SUAP y el 061.

Han sido dos de los voluntarios de Protección Civil, Ramón Mesa y Manuel Giménez, los encargados de liderar esta misión que hicieron, de manera altruista, durante todo el tiempo que duró el estado de alarma. Con la llegada de la ‘nueva normalidad, el servicio que realizaba Protección Civil quedó desactivado y los servicios sanitarios tuvieron que afrontar la ola de contagios en época estival sin su refuerzo.

La Costa y la Alpujarra, que en la última semana ha registrado 67 positivos –a fecha 28 de septiembre-, recuerdan en este momento la importancia del trabajo que estos voluntarios desarrollaron en primera línea de batalla durante los meses críticos de la pandemia. Ahora, con una remuneración económica y colaborando con la prestación de la ambulancia propia de Protección Civil, Ramón y Manuel vuelven a enfundarse los trajes blancos y todo el arsenal de medidas necesarias para mirar al coronavirus a los ojos.

Con guantes, gafas y pantallas como escudo, dicen que no tienen miedo, pero sí que sienten la responsabilidad corriendo a toda velocidad por su cuerpo cuando hay un aviso. “Lo que haría falta de verdad es que la gente se diera cuenta de que esto no es ninguna broma”, señala Ramón. “Es importante que sepamos que en cualquier despiste podemos contraer el virus y que puede tener consecuencias muy graves”, comenta Manuel con ese tono conciliador que le caracteriza.

Están, por otro lado, contentos de volver al trabajo “de campo” acompañados del equipo de profesionales del SUAP y del 061. La ambulancia roja de Protección Civil vuelve a estar envuelta en plástico –nunca dejó de estarlo- para facilitar la desinfección de los materiales y para que los traslados se hagan con las máximas garantías de seguridad. Operativos y localizables las 24 horas, estos dos héroes naranjas vuelven a dar un soplo de aire a los sanitarios de la Costa y se sitúan en la primera línea “con ganas” de luchar contra el virus para ganarle la batalla lo más pronto posible.