Motril muestra su apoyo unánime hacia las familias de las personas desaparecidas
En la concentración ha participado la familia de María Teresa Fernández, la joven motrileña desaparecida en el año 2000
El Día de las Personas Desparecidas sin Causa Aparente no pasará desapercibido en la historia reciente de Motril. El ayuntamiento ha escenificado hoy un compromiso que no se ciñe exclusivamente al carácter institucional, que así ha sido por aclamación de todos los grupos políticos de la corporación municipal motrileña, que han suscrito la moción leída hoy por su alcaldesa, Luisa María García Chamorro, sino porque se ha pretendido hacer una llamada a la conciencia no sólo de la sociedad motrileña, sino la española en general, ante la realidad de la situación de desgarro en la que viven centenares de familias en todos el país, y en torno a la cual se está luchando denostadamente por visibilizarla desde un amplio sector social.
A tal fin, desde la casa consistorial se lanzó una llamada a la concentración de familiares, amigos y vecinos de Motril. Un acto, de enorme respeto y compromiso, que ha congregado a un público numeroso que jamás ha olvidado y que se presta a no hacerlo.
Precisamente, la moción ahonda en ese compromiso: “los Ayuntamientos, en tanto que la administración más cercana, estamos llamados a jugar un papel activo frente a la realidad de las desapariciones: han sido 30.000 las denuncias registradas en España en el último año, y cerca de 180.000 desde el inicio de su registro oficial en 2010 por el Ministerio del Interior”. De la misma forma, el texto advierte que cuando se produce una desaparición, “el lugar es determinante y el papel de los Ayuntamientos para responder con eficacia desde el primer minuto resulta imprescindible y de alto valor. La rápida acción informativa, la atención a las familias, la ayuda de la ciudadanía local, la cartografía del territorio y la coordinación de la Policía Local con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado deben formar parte de un plan de acción municipal bien definido y conocido por todos”.
Tras la lectura de la declaración se han sucedido las palabras emocionadas y agradecidas de una familia que está presente, desde hace veinte años, en el corazón de todo Motril, la de María Teresa Fernández, desaparecida en agosto del año 2000. La hermana, Mercedes y los padres Teresa y Antonio no han ocultado su gratitud y su llamada a la esperanza, no solo en torno a su hija sino hacia todos los desaparecidos de España. Para la primera autoridad municipal, “todos debemos ser conscientes del trauma que una desaparición ocasiona en las familias, algo terrible que se multiplica cuando esas mismas familias se tienen que enfrentar a la soledad que envuelve el paso de los meses y de los años en su búsqueda de respuestas”.
Dignidad y entereza
La alcaldesa, Luisa María García Chamorro, ha recordado que, en 2014, Motril se convirtió en un foro nacional sobre personas desaparecidas, durante el curso organizado por la UNED que sirvió de llamada a la conciencia de toda la sociedad en general, ya que todas, absolutamente todas las personas, pueden ayudar y contribuir decisivamente en la localización de los desaparecidos. Es más, el periodista Francisco Lobatón, que participó en el curso, reiteró ese mensaje lanzado a la sociedad: “España es un país solidario, la colaboración popular es un extraordinario potencial aunque hay que encauzar bien esa ayuda”, dijo el periodista quien tuvo ocasión de compartir un momento de especial humanidad con los familiares de María Teresa Fernández, a los que conoció al principio de su dramática historia. “Esos mismos familiares que hoy se encuentran aquí, recibiendo el amor de todos nosotros y que, desde hace veinte años, han sido uno de los mayores ejemplos de dignidad, entereza, fuerza y dignidad que se conocen en todo el país. Y ello es así porque jamás se han dado por vencidos”, añadió al término del acto, la alcaldesa de Motril.
Y es que la imagen de una joven motrileña ha presidido fuertemente la concentración de hoy. Durante muchos años -desde el 18 de agosto de 2000- la ciudad de Motril ha sido el epicentro del interés nacional en torno al caso de la desaparición de María Teresa Fernández, la joven de 18 años de edad cuyo rastro se esfumó en plena celebración de las fiestas patronales nuestra ciudad. Sus padres, Antonio y Teresa, han tenido durante todo este tiempo la gallardía no sólo de no cesar, ni un segundo, en la búsqueda de respuestas, sino al mismo tiempo de dar su aliento a quienes están en su misma situación. “Allá donde vayas, incluso de paseo, nunca dejas de mirar, de observar”, dijo en una ocasión, Teresa, la madre, “con la dignidad que siempre la ha caracterizado y que debería servir para que toda la sociedad española nos miremos en esta mujer increíble y valiente y aprendamos de ella”, concluyó la alcaldesa, Luisa María García Chamorro.
Instantes antes de la lectura del manifiesto institucional, los padres de María Teresa y la alcaldesa han desplegado un mural que recuerda que la búsqueda de respuestas sigue vigente después de veinte años. Al mismo tiempo, la fachada del edificio municipal ha quedad iluminada en color verde.